Carolina murió.
La mató su papá, porque no midió su fuerza al pegarle por haberse hecho pis encima.
Y como su muerte fue tan injusta, quise retratarla como una santa, como si al convertirse en mártir pudiera ayudar a todas las otras nenas que pasaron por lo mismo.
Realizado en tinta china sobre papel, fue un trabajo que me encargaron para la muestra colectiva que se desarrolló en el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, enmarcada en las actividades de la Semana por la No Violencia.
Tinta china sobre papel
60 x90 cm
Detalle
2011
Ana Dueñas
Tinta china sobre papel
60 x90 cm
Detalle
2011
Ana Dueñas